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¿Shibari?

  • Foto del escritor: Alexandra Salgado
    Alexandra Salgado
  • 8 sept 2019
  • 2 Min. de lectura

Gif recuperado de google.com



Más de uno ha llegado a tener fantasías sexuales con ser inmovilizado o inmovilizar a su pareja en un juego erótico, una actividad conocida como bondage y popularizada en los últimos años por el interés que causa a los participantes debido a su inquietante sensualidad y erotismo. Uno de los estilos más comunes para esta práctica es el Shibari, es un arte japonés, que consiste en la atadura de la pareja por medio de una cuerda de fibras naturales que con nudos y giros estratégicos crearán líneas estéticas por todo el cuerpo.

Este estilo tiene su origen en un arte marcial que se utilizaba para atar a los prisioneros y era conocido como Hojõjutsu y que fue deformado hacia lo erótico a principios del siglo XX.


Está práctica viene acompañada de una serie de estrategias que se pueden aplicar de diversas formas al momento de intimar, y algunas de ellas son:

Determinar quién tendrá el papel dominante y el sumiso.

Acompañar de mensajes que inciten a la provocación.

Colocar estratégicamente los nudos en puntos de acupuntura que estimulen la energía sexual.

Medir la fuerza de las ataduras.

Manejar códigos de seguridad en caso de incomodidad.

Tener confianza en tu pareja.

ADVERTENCIA: si los nudos se hacen con demasiada fuerza pueden causar desmayos, además hay que evitar atar a la persona del cuello o articulaciones.

Este tipo de actividades requieren de mucha confianza, ya que a pesar de que permite un erotismo tanto físico como psíquico, tiene sus riesgos y aunque no requiere de tener un conocimiento nivel experto, si no se realiza con las medidas adecuadas, puede llegar a perjudicar no solo la experiencia, sino la salud.


Las ataduras tienen un diseño que resalta la belleza del cuerpo, evidenciando las partes más sensuales e íntimas, así como resalta la curvatura del cuerpo utilizando cuerdas en su mayoría de algodón para evitar marcas en la piel prolongadas, todo esto, mientras se experimenta con distintas posiciones según la intensidad a la que se quiera llegar.

Como lo hemos mencionado anteriormente, te invitamos a disfrutar de tu sexualidad con precaución y decisión, práctica este tipo de actividades sólo si te encuentras seguro.

Ahora te invitamos a que nos cuentes, ¿intentarías esta práctica?


-Mendoza






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